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Once palestinos murieron y más de 80 resultaron heridos por balas en una incursión militar israelí en Naplusa, en Cisjordania ocupada, donde se registraron varios enfrentamientos, según la Autoridad Palestina. Además de un adolescente de 16 años, nueve hombres de 23 a 72 años murieron durante la incursión, informó el Ministerio de Salud palestino. Horas más tarde, anunció la muerte de otro hombre de 66 años por inhalación de gas lacrimógeno. Al menos 82 personas fueron hospitalizadas por heridas de bala en diferentes establecimientos de esta gran ciudad palestina, algunas de las cuales están en un estado grave, excluyeron el ministerio en un comunicado. Las fuerzas israelíes indicaron poco antes de las 10H30 (08H30 GMT) que estaban llevando a cabo una operación en Naplusa y que iba dirigida a sospechosos «en un apartamento escondite», acusados de ataques en Cisjordania. Guterres describe la situación como «la más explosiva en años» El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, lamentó que la situación «en el territorio palestino ocupado» es «la más explosiva en años» en un contexto de un «proceso de paz» israelí-palestino «bloqueado». «Nuestra prioridad inmediata debe ser evitar una mayor escalada, reducir las tensiones y restaurar la calma», dijo. Se trata de la incursión más sangrienta en Cisjordania desde por lo menos 2005 y el balance de muertes supera al del 26 de enero, cuando otra incursión del ejército israelí en Yenín se saldó con 10 muertos, entre ellos combatientes y una sexagenaria. La madrugada del jueves, varios cohetes fueron disparados desde la Franja de Gaza hacia Israel, aunque no se reportaron bajas. El Ejército israelí dijo que lanzaron seis cohetes, de los cuales su sistema de defensa aérea interceptó cinco. Testigos del lado palestino indicaron se dispararon al menos ocho cohetes. Los soldados israelíes abandonaron Naplusa unas tres horas después, según corresponsales de la AFP. Uno de ellos vio soldados israelíes lanzar granadas de gas lacrimógeno en dirección a jóvenes palestinos que tiraban piedras contra vehículos militares y quemaban neumáticos. Reacciones El portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ned Price dijo que Washington «reconoce los problemas de seguridad muy reales que enfrenta Israel», pero expresó su preocupación «por el gran número de heridos y la pérdida de vidas». El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, también expresó su preocupación por «la espiral de la violencia en Cisjordania». Jordania, a su vez, hizo un llamado a la calma y dijo que trabajará «de manera intensa con todas las partes» para poner fin a la escalada de violencia. Las fuerzas israelíes realizan desde hace casi un año operaciones presentadas como «grupos antiterroristas» en búsqueda de «sospechosos» en el norte de Cisjordania, particularmente en las ciudades de Yenín y Naplusa, bastiones de armados. Estos últimos enfrentamientos ocurren en un contexto de aumento de la violencia en Cisjordania, territorio ocupado palestino desde 1967 por Israel. Después del operativo de enero, se registraron tiroteos entre grupos armados y el ejército israelí y se produjo un ataque en Jerusalén-este. «Impedir más violencia es una prioridad urgente», afirmó el lunes Tor Wennesland, mediador de la ONU para Oriente Medio. En lo que va de año, el conflicto israelo -palestino ha costado la vida a 60 palestinos, incluyendo activistas, civiles y también combatientes. Nueve civiles israelíes y una ucraniana han fallecido en el mismo período, según recuento de la AFP a partir de fuentes oficiales israelíes y palestinas.
