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Si hace un año alguien pensaba que la guerra solo iba a afecta a los ucranianos, tardaría muy poco en darse cuenta de su error . Nos ha golpeado, y mucho, allí donde más nos duele: en el bolsillo. Bien lo sabe Juan , protagonista del vídeo que encabeza este reportaje, que sufre en primera persona, como todos nosotros, los principales efectos económicos de doce meses de contienda. Antes de la invasión rusa llenábamos el depósito de gasolina a 1,48 euros el litro. Meses después llegó a alcanzar los 2,15. También se ha disparado la bombona de butano, que pasó de 17,75 euros a 19,55. Mientras, la factura media de la luz subió de 79,11 euros a 105,48: 25 euros más . Créditos – Producción: Daniel Caballero – Guión: Javier Nadales – Ilustración: Carlos Palanca En el supermercado, productos como el pan, la leche o el aceite han multiplicado su precio. Éste último es uno de los que más se ha encarecido: el litro pasó de 1,46 euros a 3,18. Ni siquiera la hostelería nos ha servido de refugio: bienes como la cerveza también cuestan más que hace un año. Incluso las reformas en casa se han visto afectadas. Esta es la historia de Juan , que en realidad es la historia de todos nosotros y de cómo ha sufrido nuestra economía durante el primer año de guerra.
